Una cámara on board pesa 78 gr, pero… ¿sabes cuánto pesaba en 1985?
En el Gran Premio de Holanda de la temporada 2015, en uno de los circuitos más legendarios del Mundial, un nuevo récord quedó registrado en los libros de historia de este deporte. Pero esta vez no hablamos de vueltas rápidas, victorias o podios.
En esta ocasión fue la cobertura televisiva la que firmó un dato que rompe con todos los récords anteriores: un total de cien cámaras se encargaron de cubrir absolutamente todos los ángulos del GP, a fin de garantizar la mejor retransmisión para los aficionados.
Este hito coincidió, además, con un onomástica muy particular. Treinta años antes, y también en Assen precisamente, la Honda pilotada por Randy Mamola alojaba la primera cámara on board empleada en el Campeonato del Mundo de Motociclismo.
El técnico responsable de esta audacia fue David Earl. Y resultó ser un gran éxito, si bien bajo la lluvia de Assen, aquel sábado, Randy Mamola se escapó en la salida y lideró hasta la última vuelta, sin ofrecer más imágenes que las del circuito vacío que iba recorriendo casi en solitario.
En constante evolución
A pesar de esto, las imágenes impresionaron a los aficionados y a todos los medios de comunicación, y la retransmisión del GP de Holanda de 1985 se convirtió en todo un hito mediático. Por supuesto, desde entonces nada fue lo mismo.
El Mundial de MotoGP ha evolucionado mucho en las últimas décadas y, al igual que las cámaras on board, que hoy solo pesan 78 gramos, todo ha alcanzado un alto grado de sofisticación técnica: desde el propio diseño de la moto hasta la eficacia de los carburantes, pasando por temas tan importantes como la innovación o la seguridad de los propios pilotos.
No podemos olvidar que, por ejemplo, las motos de la categoría reina llevan hoy 20 litros de carburante, con los que deben ofrecer un máximo rendimiento, en un campeonato cada vez más exigente.
Alcanzar estos logros es resultado de arduas tareas de investigación. La labor conjunta liderada por Repsol y Honda desde hace más de veinte años es un ejemplo más de este esfuerzo; solo una muestra de las cotas que el Mundial de MotoGP puede seguir alcanzando en el futuro.