La normativa general de circulación puede variar a medida que avance un viaje en moto cuyo itinerario recorra distintos países. Desde el sentido de los carriles a los requisitos administrativos, pasando por curiosas normas particulares, no importa el continente en el que estés, te puedes llevar alguna sorpresa.
El lado de la calzada por el que se circula aparece como el aspecto más básico de la circulación. En la mayoría de países del mundo se circula por el lado derecho de la calzada. En Europa, en el lado izquierdo sitúan la circulación en Irlanda y Gran Bretaña, pero este cambio sólo se experimenta sobre la marcha en carretera si accedes por el paso francés de Calais, a través del túnel del Canal de la Mancha. Deberás tener esto en cuenta en otros continentes, ya que Australia, Japón, Malasia, Indonesia, Sudáfrica, India, Nueva Zelanda, Kenia, Tanzania, Mozambique y una veintena territorios de mayor o menor tamaño también se rigen por el mismo sistema.
En Europa y el resto del mundo también experimentarás cambios en cuanto a los límites de velocidad y la forma de pagar los peajes. Los 120 km/h de máxima en autovía y autopista españolas se extienden a Bélgica, Finlandia, Irlanda, Grecia, Portugal, Suiza y Suecia.
En Francia, Luxemburgo, República Checa, Holanda, Croacia, Dinamarca, Hungría, Italia, Rumanía, Eslovaquia y Eslovenia, el límite de velocidad crece a 130 km/h. En Polonia es de 140 km/h y, en las autopistas austriacas, de 180 km/h. El verdadero paraíso de la velocidad está en Alemania, con numerosas vías sin límite alguno, aunque en algunos tramos se contemplan franjas horarias.
Sin embargo, en carreteras secundarias te sorprenderá que, en Francia, por ejemplo, el carril central es común para adelantamientos en ambos sentidos. Se encuentra en tramos rectos y sólo se puede emplear en caso de que nadie lo esté usando ya en el sentido contrario. Suena como jugar a la ruleta rusa, pero en la práctica resulta extremadamente útil. ¿Quién no ha pasado kilómetros detrás de un vehículo más lento sin poder adelantarlo?
En Francia también tienen una forma particular de concienciar sobre la seguridad en el tráfico. No te sorprendas si descubres señales en el arcén con siluetas humanas a escala real pintadas de negro; cada una representa a una víctima de accidente en el mismo tramo que transitas en ese momento. En México, por ejemplo, estos lugares se marcan con una estrella sobre el asfalto.
En España, los peajes se pagan directamente al finalizar el tramo de autopista que se ha transitado. El sistema es similar en otros países como Francia. En otros territorios, como Austria, República Checa y Bulgaria, se compran pases con distinta validez. En Bélgica, sin embargo, sólo se paga peaje en el túnel Liefkenshoek, en Amberes. Como ves, el sistema puede variar en cada país, por lo que debes tener en cuenta las condiciones del lugar que recorra tu itinerario. En Sudamérica: Perú, Bolivia y Argentina no contemplan peajes para las motos y cuentan vías especiales en el control de las autovías.
Una parte importante de tus problemas en una frontera puede estar relacionada como la documentación de tu moto. Debes llevar contigo el permiso de circulación y la ficha técnica originales, a tu nombre y con la ITV en vigor hasta fecha posterior a tu vuelta, sin deteriorar, con seguro y carta verde –seguro internacional-. Si te falta algún documento, no importa donde estés, tu moto puede quedar paralizada en cualquier momento.
Adicionalmente, el carnet de passage en douane es un documento que puede ser muy importante si vas a viajar por el mundo, ya que es como el pasaporte de tu moto. Permite la importación temporal sin depositar aval bancario. El fin es asegurar que se pagan los impuestos y aranceles si no vuelve a salir del país o no lo hace en el plazo establecido. Sin él, no podrás entrar en los países que tengan en cuenta este documento.
Por darte un ejemplo cercano, en Marruecos debes entrar y salir del país con el mismo vehículo. En el extremo opuesto, en algunos países de África es fácil cruzar la frontera entre dos países sin llegar a percatarte de ello. No hay mucho control y menos para las motos.
Los límites de alcohol en la conducción son reducidos en todas partes. En Europa, oscilan entre 0’2 y 0’5 gr/l, dependiendo del país. La indulgencia aumenta hasta el 0’8 gl/l en Gran Bretaña, pero se reduce a 0’0 en República Checa, Albania o Eslovaquia. De todas formas, beber alcohol en moto nunca es una buena idea.
En Australia, deberás fumigar tu moto antes de entrar en el país, venga de donde venga. Se establece una cuarentena de diez días ampliable a 40 hasta que vuelvas a subirte en ella. También en Chile exigen las motos razonablemente limpias.
Si viajas con tu moto a Estados Unidos, tienes que solicitar los permisos por Internet. Mejor tener el vehículo en propiedad. Si no, los trámites se complican. Tu moto recibirá permiso por el mismo espacio de tiempo que tú mismo. Te llamará la atención que, en EEUU, en los cruces con semáforo en rojo, se puede girar a la derecha con precaución si no se indica lo contrario. Los semáforos están situados al otro lado del cruce –igual que en Canadá- y en las rotondas se las ingenian mejor que en España.
En las rotondas americanas, en lugar de tener preferencia una de las incorporaciones de forma permanente –lo que provoca largos atascos en las vías que no tienen preferencia de acceso-, cuando hay tráfico denso se incorpora un vehículo de cada vía por turnos. Si no sigues esta pauta, parecerás un desconsiderado. Por el contrario, en Francia tiene preferencia el vehículo que se incorpora a la rotonda. En una liga aparte juegan las rotondas salvajes de India, Tailandia, en general el resto del Sudeste Asiático, donde no parece regir regla alguna.
En cuanto a las motos, a los americanos no les gusta que adelantes entre coches. Tampoco a los suizos. De nuevo en Francia, cuando transites en moto por una vía de doble sentido con línea continua, muchos conductores de coches se echarán a la derecha para que puedas adelantarles sin invadir el carril contrario. En México deberás tener mucho cuidado con los socavones en el firme.
Como anécdota, Rusia se sitúa en una categoría aparte. El porcentaje de conductores habiendo ingerido alcohol es más elevado que en otros países. Las carreteras fuera de las ciudades son interminables, con muchos vehículos pesados y prácticamente ninguna moto.