Tras la explosión de la tecnología 3D comenzaba una carrera que aún dura hoy en día. Mientras podamos añadir más polígonos (explicación muy simple: un objeto en 3D es una malla de polígonos rellenos de píxeles/ texturas), mejorar la conducción, aumentar aún más la resolución o los fotogramas por segundo, los videojuegos de motos seguirán mejorando.
El éxito de la PlayStation de Sony fue tal que permitió a la empresa japonesa lucirse sin escatimar detalles con su nueva consola. La PlayStation 2 mantuvo las bondades de su predecesora y corrigió sus mayores defectos haciendo que desarrolladores de todo el mundo pudiesen crear entornos virtuales complejos.
Fueron muchos los juegos de motos lanzados para esta consola. Los juegos oficiales de MotoGP nos traían la experiencia completa: los circuitos, las motos y los pilotos. Aún a día de hoy tiene su encanto subirte a la NSR500 de Alex Crivillé y coronarte campeón en Jerez.
Si lo que buscabas era un reto, un simulador que te exigiera lo mismo que las motos de verdad exigen a nuestros pilotos, tus juegos eran el Tourist Trophy o la saga Riding Spirits. Dos juegos en los que tomar una simple curva suponía toda una hazaña.
Pero la PlayStation 2 no reinaba sola, un fuerte competidor salió al mercado: La primera Xbox. Aunque en esta primera versión no contara con ningún título de motos exclusivo, licencias multiplataforma como MotoGP o los siempre divertidos MX vs ATV no dejaban a esta consola atrás en absoluto.
Los usuarios de PC por su lado disfrutaban de una versión tan buena o mala como sus máquinas pudieran permitirse con títulos tan importantes como los de MotoGP o la serie SBK, basada en el Mundial de Superbikes.
Los años de estas dos joyas tocaban a su fin cuando las tiendas de electrónica se llenaban de pantallas planas y las tiendas de segunda mano de televisores de tubo gigantes. Con la llegada de las pantallas planas aprendimos por primera vez los términos HD Ready o Full HD y todos esperábamos con ansias las consolas que nos permitirían aprovechar al máximo las resoluciones de nuestras televisiones nuevas.
La primera en llegar sería la Xbox 360 y en menos de un año le seguiría la PlayStation 3 y con ellas, la experiencia de conducir una moto virtual en HD. Aunque la mayoría de juegos no pasaban de los 720p había muchos que llegaban a los 1080p del Full HD.
En esta época los grandes títulos se consolidaron, MotoGP mejoraba año tras año lanzando no solo un juego de motos, sino el juego del Mundial de Motociclismo. Ajustando los equipos y pilotos según los cambios sufridos cada temporada y mejorando motores gráficos y el gameplay general en busca de una experiencia completa para los auténticos fans de MotoGP.
El Mundial de Superbikes junto al Mundial de Motocross también disfrutaron de sus títulos en las nuevas consolas y PCs del momento.
En lo que a la acción Arcade se refiere destaca una serie que sigue muy viva y que nos despierta una sonrisa cada vez que cogemos los mandos: MX vs ATV. Esta divertida saga seguía ofreciendo sus piruetas imposibles y esos saltos acrobáticos que desafiaban lo que aprendimos en clase de física.
Esta nueva generación dejó claro que la experimentación de épocas anteriores se había acabado, el perfeccionamiento de las sagas consolidadas era el objetivo actual. Los juegos de motos, se habían hecho mayores.
En la próxima y última entrega de esta serie repasaremos el estado actual de los juegos de motos, las consolas de nueva generación y las posibilidades de la realidad virtual. ¿Será tiempo ya de que despegue?
Foto cabecera: Riding Spirits