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Las rutas en moto en Galicia ofrecen tantas posibilidades que es difícil decidirse. Puedes recorrer sinuosas e interminables carreteras comarcales llenas de puntos interesantes donde parar, o también adentrarte en carreteras de montaña y disfrutar de vistas espectaculares. Para los entusiastas del enduro, el monte gallego es el más divertido patio de recreo. También vas a disfrutar a lo grande si lo tuyo es el Quad, ya sea en un ATV 4×4 para el barro o un ligero 450 para los caminos de bosque.
En cuanto al turismo en carretera, la cultura motociclista tiene un fuerte arraigo en Galicia y no será extraño cruzarte con muchas motos, algunas con muchos años pero probablemente perfectamente conservadas; tienen especial devoción por ellas e incluso puedes seguir sus aventuras en grupos de Facebook como Old School Galician Country, son gente encantadora y siempre están por la zona.
Old school Galician Country 2016 from Hilario Miranda Curra on Vimeo.
Podríamos pasar una vida contando anécdotas motociclistas en territorio gallego, así que vamos a centrarnos en datos concretos y sugerirte un par de rutas interesantes, aunque sólo te permitirán descubrir una pequeña parte de todo lo que ofrece esta impresionante demarcación geográfica. ¿El mejor momento? Sin duda, la primavera con cielos despejados y playas completamente desiertas.
Tomando como eje central Santiago de Compostela, la ruta desde allí hasta Finisterre resulta de lo más recomendable. No es larga y recorre preciosos tramos de costa con lugares impresionantes. Con el mapa delante, no te será difícil dirigirte a la Ría de Noya y sus bancos de marisqueo hacia Costa da Morte, que también ofrece paradas inolvidables. Otra ineludible es la Cascada de Ézaro, la única de Europa que vierte sus aguas directamente al mar. El Faro de Finisterre es otro sitio que no te puedes perder. Por la zona encontrarás numerosas referencias al Camino de Santiago.
En dirección a Orense, los cañones del río Sil, punto de encuentro de sus orillas con las del río Miño, encontrarás cañones de 500 metros de profundidad y diminutos viñedos en escarpadas laderas. La ruta es espectacular. Encontrarás embarcaderos y si paras en el mirador O Cabo do Mundo, aprovecha para proponer matrimonio a tu acompañante; desde luego estarás en un sitio perfecto para ello. Galicia ofrece multitud de rutas de tres o cuatro horas que te permiten acotar planes o perder tiempo donde prefieras.
Foto: Ramón Cutanda López | Flickr
Aunque la era de Internet hace casi imposible perderte, no siempre es fácil saber dónde está exactamente ese sitio inigualable lejos del turismo más popular, y al que sólo un motorista de la zona sería capaz de llevarte. Los chicos del Motoclub Compostela son gente de lo más hospitalaria. Puedes contactar con ellos en su página web y te facilitarán todo tipo de información; incluso te acompañarán. Están acostumbrados a hacerlo. Por último, hay que hacer una mención especial al aspecto gastronómico. Estás en el edén del marisco y la buena cocina es otro rasgo inequívoco de Galicia. Prepárate para disfrutar.
Foto cabecera: David Vazquez | Flickr + Pexels