Foto: gunfightersmc.com
Los policías no son tipos asidos a un uniforme, un silbato, una libreta y una gorra calada. Son personas humanas con pasiones al margen de su estigmatizada profesión. Pero una cosa sí tienen: suelen organizarse entre ellos cuando comparten una afición. Tienen sus propios clubs deportivos, sus equipos de fútbol o baloncesto, sus juegos olímpicos -ahí lo tienen difícil, pues compiten con los hercúleos bomberos-. Y también su club motero. Lo formó en diciembre del 2005 un grupo de agentes de Estados Unidos retirados y ociosos, y se les conoce como los Gunfighters (http://www.gunfightersmc.com/), un nombre que destila aroma a ‘western’.
En las pelis del oeste, cuando el pueblo tenía problemas con los forajidos, cuando la ley no tenía ningún valor, era necesario que un grupo de hombres mantuviera el orden.
Ellos eran, efectivamente, los ‘gunfighters’. Por eso, cualquiera que quiera entrar en este club motero, debe cumplir una condición indispensable: ser policía, ser heredero de aquellos tipos con espuelas que poblaban el oeste americano.
Foto: pixabay
Sus colores, aunque a los cuerpos de seguridad se les asocia con el azul, son el banco y el negro, los tonos que usaban los primeros coches policiales en EEUU. La calavera es un homenaje a todos los agentes que, según rezan las bases del club, realizaron “el sacrificio final”, un modo de decir que perdieron la vida en acto de servicio.
Las pistolas que porta el cráneo, de seis balas, son las que usaban los primeros hombres de la ley, nada que ver con las semiautomáticas de hoy en día. Entre los dos revólveres, la estrella de ‘sheriff’ que lucieron los policías del oeste, y sobre la cabeza, el clásico sombrero.
Foto: gunfightersmc.com
Los Gunfighters ( http://www.gunfightersmc.com/) llevan motos tipo ‘cruiser’ americana, ya sea una Harley Davidson, Victory o Indian, y cuentan con su propio apodo, el cual se les impone una vez ingresan en el club. Formar parte de esta hermandad no es coser y cantar para los aspirantes, ya que antes deben pasar un periodo no inferior a un año en el que deberán aguantar ciertas perrerías, como limpiar y vigilar las motos de sus compañeros.
La primera ciudad española con ‘gunfighters’ fue Mallorca, en el 2009. Le siguió Barcelona al año siguiente, metrópolis que se ha convertido en la nave nodriza del club en todo el país. A partir de ahí, brotaron policías moteros en Tarragona, Girona, Valencia, Madrid, Sevilla, Santander y Alicante. También los hay, además de las cerca de 60 hermandades de Estados Unidos, en países como Suiza, Luxemburgo, Italia, Brasil, Francia, Alemania, Nigeria y Madagascar.
Foto: Willy GFFG
El Gunfighters MC (moto club) cuenta con su propio credo, redactado por un miembro de Boston. Algunas de las frases que podéis encontrar por su web son para enmarcar. Si les ves por la carretera, salúdales, pero nunca les retes al alba en lo alto de una colina.
buenas tardes
soy el vice presidente de un grupo MCLE situado en Italia, LEGIONARIES MCLE
quiziera saber gunfighter en Palma de Mallorca
gracias