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El Motoalmuerzo es un planazo porque, estés donde estés, seguramente tengas uno muy cerca.
Si tienes tiempo para hacer turismo en moto en largas travesías, eres sin duda un@ motorista con suerte. Sin embargo, la realidad tiene esa curiosa manía de ponerte los pies en la tierra cuando se trata de contar con tiempo libre que dedicar a uno mismo, ése que siempre escasea, que si es al manillar de una moto, mucho mejor.
Si tu día a día no te deja mucho espacio para disfrutar de tu moto como te gustaría, quizá es el momento de buscar en Internet el calendario de un montón de Motoalmuerzos que organizan decenas de motoclubes en distintas comunidades autónomas. El plan consiste en salir temprano de casa en moto un sábado o domingo para llegar a un punto de encuentro y realizar una ruta con otros motoristas, previamente planificada por el organizador, moto club o foro de usuarios a cargo del evento.
Te vas a pasar un día de buenas carreteras y paisajes espectaculares que igual ni conoces, pero seguro que tus acompañantes los tendrán bajo control para guiarte. Tú encárgate de disfrutar, que es para lo que has venido. Un Motoalmuerzo no requiere poseer una moto de gran cilindrada.
En internet es fácil encontrar clubes y foros de usuarios que realizan salidas de un día. En dichos foros puedes presentarte y contactar directamente con el resto de usuarios, incluso si no conoces a nadie en el grupo. El sentimiento de hermandad entre los motoristas es bien conocido. Siempre vas a ser bien recibido en cualquier evento y encontrarás el mismo buen ambiente de las concentraciones, aunque la experiencia quede mucho más compactada en el tiempo.
Como te puedes imaginar, el otro gran momento del día exige el ritual de una buena parada para llenar el estómago, sobre todo para calentar el cuerpo si sales en otoño e invierno. En eso también estás de suerte porque, vivas donde vivas, la diversidad geográfica de este país sólo es comparable a la disparidad y calidad de su gastronomía.
Lo más lógico es que el apartado gastronómico esté definido por el lugar donde estés. Los motoristas de la zona centro mantienen desde hace décadas la buena costumbre de compartir un cochinillo en Segovia o un buen chuletón en Ávila. Y es que pocas sensaciones mejores se pueden experimentar que encarar en moto la cuesta de las Perdices en la A6 en una soleada mañana de sábado dejando atrás las calles Madrid. Lo mismo se puede decir de cualquier otro lugar. Si estás en la costa, el menú girará seguramente en torno al pescado o el marisco. Si estás en Cataluña, una tradicional calçotada puede ser la excusa perfecta para pasar un día genial en moto entre amigos. De todas formas, si sales a menudo, sabrás que no te conviene comer demasiado para que no pese el estómago en el camino de vuelta. Si la distancia o la hora no son problema, las sobremesas prometen buena conversación entre motoristas, lo que también te dará quizá un nuevo círculo de amistades.
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En comparación con las grandes concentraciones, el Motoalmuerzo se reduce a apenas media jornada, pero desde luego suena mucho más interesante que tomar un aperitivo a pie cerca de casa. Si eres un habitual, puedes compartir con nosotros tus rutas más interesantes, así como la gastronomía de la zona. Nos encanta montar en moto y no hay ruta en moto no queramos hacer, ni gastronomía que no queramos disfrutar.
Foto de cabecera: Craig Howell | Flickr