Motos arácnidas, o cómo fusionar dos pasiones: Spiderman y motos

Spiderman es uno de los superhéroes más queridos por la parroquia. Es lo que tiene ser un tipo campechano. Como tú o como yo, un joven normal, como los que te encuentras en la cola del pan o en el cine comprando palomitas. Tanto salva el planeta como te da los buenos días. Peter Parker se convierte en el hombre araña por accidente, sin venir de otro planeta, ni ser hijo de un dios. Tiene buen sentido del humor, y todavía no hay malo que haya podido con él. Ironman podría hacerle sombra, pero de momento no se ha dado el caso.

El disfraz de Spiderman es además un clásico entre los niños. Ajustado, rojo y azul y con la capucha arácnida. Con eso basta para creerte capaz de trepar hasta la azotea de casa (ojo, no lo intenten en casa). Pero cuando uno se hace mayor y además es motero de pata negra, lo de enfundarse la malla ya no queda tan bien. Hay que buscar alternativas. Y como a nuestro héroe se le ha visto en varias ocasiones a lomos de una motocicleta, qué mejor manera de mantener el vínculo que maquearse la moto en su honor.

De circuito, ‘Chopper’, ‘Trail’ o de juguete. El casco, el mono, las botas, los guantes. No hay dos iguales y los niveles de admiración son muy dispares. Pero en todos se respira lo mismo: un sentido homenaje a un personaje que alegró la infancia. Y, aunque quizás no lo admitan, también la madurez.

Aquí van algunos ejemplos de moteros que han fusionado dos de sus mayores pasiones. Con diseños para todos los gustos.

Quizás el más trabajado de todos sea este ejemplo que en julio nos mostraba cómo había convertido su Honda CBR 250 RR en la moto del mismísimo Spiderman. Con casco incluido. La customización de la moto coincidió con el estreno de la última película del hombre araña, ‘Spider-Man: Homecoming’. El autor de esta obra de arte es Andri Rusli, que en el morro quiso rendir homenaje al enemigo del superhéroe, Venom, un extraterrestre.Sobre la moto original de Spiderman, hay escaso documento gráfico porque no ha sido un elemento clave en sus películas, como sí lo fue en las producciones de Batman, por ejemplo. En los dibujos animados, sin embargo, sí ha asomado algún que otro prototipo.

En el fenómeno fan todo tiene un origen. Suele suceder en la infancia, cuando uno, sin saber muy bien la razón, escoge un personaje y se lo hace suyo. Camisetas, gorras, zapatillas. Y también bicicletas, a falta de moto. En Instagram abundan los muchachos que se sienten Spiderman mientras pedalean por su barrio.

Por último, porque las aficiones no tienen edad y porque nuestros mayores también tienen derecho a pasarlo en grande, os presentamos al abuelo de la minimoto Spiderman. Este sí que es un superhéroe