MotoGP es uno de los bancos de pruebas más punteros en lo que a deportes de motor se refiere. El Equipo Repsol Honda ha pasado 25 temporadas formando parte de este mundo, que se ha ido reinventando y cambiando constantemente. Aunque no todas las mejoras tecnológicas han ido siempre en la misma dirección de hacer las motos más rápidas (también hay grandes avances en eficiencia y seguridad), sí es de esperar que en 25 años se haya logrado reducir los tiempos por vuelta de algunos de los circuitos que perduran desde los tiempos de 500cc.
Phillip Island
El circuito se re-estrenó en el Mundial en 1997, dos años después de la creación del Equipo Repsol Honda. Además de clásico, podemos considerar Phillip Island como uno de los circuitos más particulares, tanto por su alta velocidad como el clima extremo que lo caracteriza.
Durante la primera visita del equipo a este trazado, Mick Doohan logró un tiempo de 1,34.113 en su vuelta rápida y la pole con un 1,33.135. El español Álex Crivillé se llevó la victoria en este GP, terminando la carrera de 27 vueltas en 42 minutos y 53.362 segundos.
Volviendo a fechas más recientes, en 2013, Marc Márquez logró firmar el actual récord de vuelta rápida en carrera con un tiempo de 1,28.108. En su más reciente victoria en Phillip Island, en 2017 Marc lograba terminar la carrera en 40 minutos con 49.772 segundos, tras haberse llevado una pole con 1,28.386.
Podemos ver que la vuelta rápida es unos 6 segundos más rápida hoy de lo que solía serlo en 1997, la pole se reduce en 4,75 segundos y para terminar la carrera hacen falta dos minutos menos aproximadamente.
Mugello
El trazado italiano es uno de los que apenas ha cambiado en lo referente a forma y distancia desde su debut en 1976 como escenario del GP de las Naciones. Conserva los 5.245 metros originales y todos sus sectores rápidos que le confieren el récord de velocidad máxima con 356,5 Km/h.
En el año inaugural del equipo, Mick Doohan se marcó todo un Grand Slam (victoria, pole y vuelta rápida) en este circuito saliendo desde una pole que había logrado en un tiempo de 1,53.524, y marcando una vuelta rápida en carrera de 1,54.381. El australiano logró completar las 23 vueltas en 44 minutos con 20.790 segundos.
De nuevo Marc, en su temporada de estreno, lograba marcar el actual récord de vuelta rápida en carrera, un 1,47.639 que lo sitúa más de 6,7 segundos por debajo del tiempo de Doohan con la 500cc en 1995.
El ganador del GP de Italia en 2018, Jorge Lorenzo, lograba acabar la carrera en 41 minutos con 43.230 segundos, teniendo esta la misma longitud de 23 vueltas que solía tener en la era de los dos tiempos. Este resultado es 2 minutos con 37.560 segundos más rápido de lo que el tiempo invertido por Mick.
Jerez
En 1995, el ganador del GP de España en el circuito de Jerez fue nada más y nada menos que nuestro actual jefe de equipo: Alberto Puig. Aunque no formaba parte de los pilotos del Repsol Honda, sí que contaba con un patrocinio de Repsol y consiguió este hito sobre una Honda. Doohan logró la pole aquel fin de semana con un 1,44.086, pero fue Puig quien se embolsó la vuelta rápida con un tiempo de 1,44.995 y la victoria, completando 27 vueltas en 47 minutos con 45.72 segundos.
En 2015 Jorge Lorenzo marcaba el actual récord de vuelta rápida con 1,38.735 lo que supone una mejora de 6,26 segundos sobre el tiempo que marcó Alberto en 1995. En 2017 era la Honda de Cal Crutchlow la que conseguía hacer la pole más rápida con 1,37.653 superando así en 6,43 segundos el tiempo de Mick Doohan. Ese mismo año era Dani Pedrosa quien se embolsaba la victoria en el circuito andaluz, finalizando las 27 vueltas en 45 minutos con 26,827 segundos, dos minutos con 18,901 segundos más rápido.
Brno
En 1996 se adaptó el circuito tal y como lo conocemos ahora. En ese año, Álex Crivillé logró la que sería la primera victoria de Repsol Honda en este trazado. La carrera alcanzó un estatus épico, cuando el español pasó la línea de meta con solo 2 milésimas de ventaja sobre su compañero de equipo, Mick Doohan. Álex logró completar la carrera de 22 vueltas en 45 minutos con 38.88 segundos. El piloto Repsol Honda marcó también la vuelta rápida en carrera en aquella edición con 2,02.791, pero la pole le correspondió a J.M. Bayle, quien realizó la vuelta en 2,02.834.
2017 fue el último año en el que esta carrera tuvo 22 vueltas y se saldó con una victoria de Marc Márquez, con un tiempo de 44 minutos y 15.974 segundos, realizando la carrera en 1 minuto y 22.910 segundos más rápido que Crivillé. El piloto de Cervera ya había conseguido marcar la pole más rápida el año anterior con un tiempo de 1,54.596 en 2016, ¡lo que supone una mejora de 8.238 segundos! La mejor vuelta rápida en carrera, por otro lado, la marcó Dani Pedrosa en 2014 con un 1,56.027; 6.764 segundos de ventaja sobre la de 1996 lograda por Crivillé.
Con estos ejemplos, los resultados son más que claros: hoy día los tiempos de vuelta se han recortado en aproximadamente algo más de 6 segundos. Esta mejora supone que las carreras duran de media unos 2 minutos con 9.337 segundos menos. Si la cosa sigue así, en otros 25 años, ¿Quién sabe cuánto más habrán podido mejorar las motos? Todavía queda margen para desarrollar nuevas tecnologías, o incluso para introducir algunas que ya se están usando en otras categorías.