Isidre Esteve recupera posiciones en una segunda etapa muy dura

Isidre Esteve continúa superando escollos en este exigente Rally de Marruecos, en el que hoy ha concluido 20º y ha escalado hasta el 23º lugar de la general de esta prestigiosa prueba puntuable para la Copa del Mundo de Rallys Cross-Country. Y eso que este domingo ha debido completar más de media etapa sin embrague en su prototipo BV6 con los mandos adaptados en el volante, un contratiempo que le ha hecho perder varias posiciones.

La jornada ha transcurrido entre Erfoud y Aoufous, con 386 kilómetros cronometrados y otros 49 de enlace. El recorrido ha vuelto a transitar por duras zonas rocosas, a las que se han sumado varios pasos de dunas que han complicado la vida a la mayoría de participantes.

Isidre Esteve partía por la mañana desde la 31ª posición y ha ido sorteando todos los obstáculos sin problemas, llegando a remontar más de diez puestos. Pero a la altura del kilómetro 185 ha sufrido un inesperado problema que le ha retrasado cerca de media hora: “Se me ha calado el coche en una zona complicada y, con las prisas de salir, he estresado el sistema de embrague y se ha roto. Ha sido culpa mía y lo positivo es que esta situación me ha servido para comprender cómo hay que tratar los mandos del volante, que funcionan muy bien gracias al buen trabajo de Guidosimplex”.

A causa de esta incidente, el Repsol Rally Team se ha visto obligado a completar los 200 kilómetros restantes de la especial sin embrague, lo que otorga un mérito enorme a su resultado final. “Ha sido una etapa muy larga, dura y exigente a nivel de navegación, con pistas muy rotas, dunas… en definitiva todos los ingredientes que debe tener un rally raid. La verdad es que, a pesar de los problemas, estamos disfrutando mucho de esta carrera que, tal como habían anunciado, está siendo un gran aperitivo para el Dakar”, declaraba un fatigado Isidre Esteve, tras 7 horas, 7 minutos y 41 segundos de pilotaje.

La etapa de mañana lunes será otra auténtica prueba de fuego para el Repsol Rally Team de Isidre Esteve y su copiloto Txema Villalobos, al tratarse de la más larga en cuanto a kilómetros cronometrados, con un total de 440 kilómetros. Además, tendrá la dificultad añadida de que servirá para estrenar el nuevo sistema de road-book que se empleará en el próximo Dakar.

“Mañana nos darán el libro de ruta pocos minutos antes de tomar la salida y ya pintado. Pero para nosotros, esto no representará ninguna novedad, ya que llevamos ensayando este sistema desde el primer día para adaptarnos lo mejor posible y estamos contentos porque con los cambios introducidos en nuestro coche, ahora podemos pasar más rápido los peligros”, explicaba Isidre Esteve.