Formado por tres equipos de 5 personas y su capitán, Holger Leprich, los Airgators son una parte fundamental de la Red Bull Air Race, donde el piloto del Equipo Repsol Juan Velarde vuela con el Edge 540 V2. Cada equipo, emplazado en lugares distintos de la pista, debe ser capaz de acceder a cualquier pilón en el menor tiempo posible para volver a levantarlos en caso de que un avión los rasgue y que el siguiente competidor no tenga que esperar dando vueltas en el aire.
Otras de las funciones que tienen estos profesionales de la competición, es montar los Airgates, estructuras de metal de una altura de un metro bajo cuyo armazón están todos los dispositivos de los pilones.
Todos los integrantes de los Airgators tienen que estar preparados para cualquier cosa: Olas, viento o una gran cantidad de pilones rasgados. Lo peor son los vientos o tormentas fuertes, ya que hacen imposible trabajar y ponen en compromiso los pilones que deben ser lo suficientemente fáciles de romper como para que el piloto no lo note y lo suficientemente resistente como para soportar vientos de 30 o 40 km/h en condiciones normales.
Para conseguir dar el 100% en las carreras, los equipos tienen uno o dos días de entrenamientos antes de cada evento. Este entrenamiento puede variar dependiendo de si la carrera sobre una superficie de agua o sobre tierra, y de otras condiciones de la pista, como oleaje, viento y disposición de los Airgates.
Pick ups o barcas
También se entrena el montaje de los pilones simulando roturas e intentando mejorar los tiempos cada vez. En caso de que la cosa se complique, el entrenamiento resulta muy valioso para enfrentarse a los imprevistos. Practicar también ayuda a acostumbrarse a las distancias que el equipo tendrá que recorrer y cómo se desplazan hasta los pilones, en carreras en tierra se usan pick ups, mientras que en agua el equipo debe llegar a su objetivo en barca. El procedimiento en ambos casos es similar, aunque hay diferencias en el montaje dependiendo de si están en agua o en tierra.
Los propios pilones están vacíos por dentro, miden 25 metros de altura con 5 metros en la base y 0,75 metros en la punta. Tienen un motor de gasolina con una hélice que expulsa aire y mantiene la presión del interior.
Tener la presión adecuada es muy importante para que el pilón sea seguro; por si es baja el pilón podría no romperse y no cumpliría su función, y si es alta el impacto con el avión será mayor. La presión se mide constantemente y si se detecta que es demasiado baja o alta se reduce o amplía la velocidad del motor, o en caso de no poder solucionarlo por sí mismo, avisa a los responsables de que la presión no es correcta.
En los últimos años se han rasgado como 2.000 pilones con lo que la formula está muy perfeccionada, además año tras año se trabaja con nuevos materiales más avanzados que permiten a los Airgators ir un paso por delante. Los propios pilotos de la Red Bull Air Race muchas veces ni siquiera sienten el haber rasgado el pilón y esta es la mejor prueba del buen trabajo que realizan.