El 22 de junio de 2008, un jovencísimo Marc Márquez subía por primera vez a un podio del Mundial de Motociclismo, al lograr la tercera posición en el Gran Premio de la Gran Bretaña celebrado en Donington Park. Era su sexta carrera en el Campeonato del Mundo de 125cc y, con apenas 15 años y contando ya con el apoyo de Repsol, se convirtió en el segundo piloto más joven de la historia en terminar en las plazas de honor. En su décima temporada, con 24 años, cinco títulos mundiales y 165 carreras a sus espaldas, el piloto del equipo Repsol Honda se ha convertido en el noveno de la historia que alcanza el centenar de podios en el Mundial.