Gracias a ese movimiento circular, el cigüeñal es el encargado de transmitir a la caja de cambios o al variador la potencia generada por la combustión en la parte alta de un motor.
Tipos de cigüeñal de moto
El tamaño y diseño del cigüeñal dependen del tipo de moto y otros factores como si el propulsor es de dos o de cuatro tiempos, del número de cilindros y de la cilindrada, entre otros aspectos menos relevantes a los ya mencionados.
Cigüeñal para un motor de cuatro tiempos
En un cigüeñal de un motor de cuatro tiempos están los apoyos, que son las partes del cigüeñal que giran sobre casquillos apoyados sobre el cárter. También están las muñequillas, que son las que mueven las bielas. Uniendo a ambos están los brazos o contrapesos.
Lo más habitual en un propulsor de este tipo es que el cigüeñal esté forjado en una sola pieza. Posteriormente los apoyos y las muñequillas reciben un tratamiento térmico que los endurece. En este proceso hay que extremar las precauciones para evitar posteriores grietas o roturas debidas a la fatiga.
En algunos casos, el cigüeñal de un motor de cuatro tiempos también se fabrica por fundición, lo que permite hacerlo hueco para que el aceite a presión circule por su interior, y así lubricar los casquillos de los apoyos y de las muñequillas de las bielas a través de pequeños orificios practicados para este fin. Del mismo modo, al ser hueco se reduce peso, lo que le permite subir más rápido de revoluciones. Estas son las vueltas que da el cigüeñal y se cuentan por minuto. Por citar un ejemplo, si un propulsor gira a un régimen de 9.000 revoluciones por minuto (rpm), esto quiere decir que el cigüeñal da 9.000 vueltas en ese espacio de tiempo.
A la hora fe fabricar un cigüeñal hay que buscar un equilibrio entre tamaño y resistencia. Por un lado, interesa que sea compacto, pero por otro debe ser los suficientemente robusto como para que no se parta en momentos de máxima exigencia. Por otro, ocurre algo similar con los apoyos. Tienen que ser lo suficientemente grandes para lograr la rigidez necesaria, pero cuanto mayor es su tamaño, hay más fricciones y esto se traduce en pérdidas de potencia superiores.
En cuanto a las bielas de un motor de cuatro tiempos y especialmente en los pluricilíndricos, lo más habitual es que estén formadas por dos piezas atornilladas entre sí, pudiéndose separar por la parte del pie que abraza la muñequilla del cigüeñal. Esto obliga a que estén sobredimensionadas en esta parte y que, por tanto, sean más pesadas.
Cigüeñal para motor de dos tiempos
En un motor de dos tiempos la función del cigüeñal es la misma, pero este es diferente al de un propulsor de cuatro tiempos, tanto en su construcción, como en su apariencia. Para facilitar su giro, en su caso cuenta con rodamientos de bolas en su apoyos con el cárter y un rodamiento de agujas en el pie de la biela. Por tanto, un cigüeñal de este tipo tiene que ser desmontable para poder instalar o reemplazar los citados rodamientos en caso necesario.
De este modo, la biela es de una sola pieza, lo que se traduce en un peso inferior. La muñequilla en la que gira la biela va embutida a presión en los brazos o contrapesos, lo que obliga a sustituirla cada vez que se desmonte, ya que reutilizarla conlleva el riesgo de que gire y provoque importantes daños en el motor. Tanto en un propulsor de dos tiempos, como en uno de cuatro, es muy importante que el cigüeñal esté muy bien equilibrado. De lo contrario, puede producir vibraciones y acabar fracturándose con el uso. Al igual que en un motor de cuatro tiempos, una de las puntas del cigüeñal (generalmente la derecha) es la encargada de transmitir la potencia a la transmisión. La del lado izquierdo marca los tiempos de encendido para que la bujía produzca la chispa en el momento preciso.
Otra característica del cigüeñal de un propulsor de dos tiempos, obligada por la admisión, es que ha de estar muy ajustado con el cárter para reducir al mínimo el espacio libre para la mezcla de combustible en esta parte del motor. Con ello se pretende también la correcta lubricación en el pie y la cabeza de la biela, y la necesaria refrigeracióndel pistón. Así se evitan también turbulencias indeseadas y se bombea correctamente la mezcla a la cámara de combustión a través de los transfers o conductos de trasvase del cilindro. Este proceso se llama precombustión y solo es posible si el cárter y el cigüeñal están bien ajustados entre sí. Por otro lado, en el comienzo de los citados transfers existen pequeñas derivaciones para conducir la mezcla hacia los rodamientos en los que se apoyan las dos puntas del cigüeñal y así mantenerlos lubricados durante el funcionamiento. Hay que recordar que en los motores de dos tiempos el engrase lo realiza la propia mezcla de gasolina y aceite que circula por su interior.
En cuanto a su aspecto, un cigüeñal de un motor de dos tiempos se distingue por que sus contrapesos son mayoresque los de un cigüeñal de un propulsor de cuatro tiempos. De esta manera se asegura un funcionamiento uniformey un régimen de ralentí estable.
Excelente explicación: clara, extensa y con un lenguaje accesible para todos.
Me encantó.
Bien detallado como trabaja el cigueñal en combinación con la caja de cambios.
Muy interesante lo que publican y didáctico. Mis modestas felicitaciones.
Gracias por compartir conocimientos importantes
Exelente basees para iniciar mi proceso como mecánico de moto
Muy interesante artículo
Muy bien explicado