9 accesorios para la moto que todo motero debería tener

Moto y piloto, de acuerdo. Con eso basta, a simple vista, para definir el mundo motero. Pero si afinamos la mirada, si vamos al detalle, nos daremos cuenta de que la familia de las dos ruedas tiene sus propias chucherías, sus caprichitos, sus ‘gadgets’ particulares. Hoy nos daremos un paseo por los accesorios para la moto ‘premium’ que cualquier motero debería tener instalados. Porque son útiles. O, simplemente, porque tú lo vales.

Topes anticaída

Pequeñas caídas pueden dejarte la moto hecha un cromo. Para evitar que una pérdida de equilibrio o que un golpe de viento te deje el chasis como un periódico arrugado, los topes anticaída pueden ser una buena solución. Se trata de un simple apéndice que se encargará de recibir el impacto y evitar que lo haga tu máquina. Ideales para un uso diario de la moto, para ciudad o pequeños desplazamientos. Pero cuidado con utilizarlos cuando nos metemos en un circuito o realizamos salidas en las que se alcanza velocidades superiores. En ese caso será importante elegir topes que sean capaces de absorber el golpe (tanto si los colocamos en la zona del motor o en el chasis) y que no lo trasladen al resto de partes de la moto, ya que en ese caso puede resultar peor el remedio que la enfermedad. Ten en cuenta que si entras en pista, puede que estén prohibidos por los posibles impactos y lesiones que puedan causar a otros pilotos. En cualquier caso, se trata de un juguetito útil y económico que te puede salvar de facturas dolorosas.

Diábolos para caballete central

Tu moto de diario no necesita un caballete porque ya tiene dos de serie: el central y la pata de cabra. Pero si te pasas a las motos de circuito, esas piezas, como es lógico, no las vas a encontrar. Imposible imaginar a Marc Márquez aparcando la Honda Repsol para ir por el pan en la Plaza Mayor de Cervera… Te va a hacer falta un caballete central, pero vamos a ir un poco más allá y te presentamos los diábolos, unos dispositivos que te permitirán usar otro tipo de soporte, menos aparatoso, más minimalista. Se trata de unos pequeños tornillos de forma tubular, fabricados generalmente en aluminio y con unas hendiduras que permiten encajar el caballete que mantiene la moto en pie. Curiosamente, también ejercen la función de tope para las caídas.

Maneta plegable anticaída

Estamos ante una auténtica maravilla estética. La maneta plegable, que te permite combinar colores en las dos piezas que la conforman, es además un accesorio muy útil para evitar desgracias mayores (sobre todo, económicas) en caso de caídas leves. En esos siniestros, en los que no sueles hacerte un solo rasguño, los frenos, y más concretamente, las manetas, suelen partirse o volar por los aires. En este caso, a no ser que tengas la mala suerte de que se queden enganchadas a otro elemento externo, se doblarán y se mantendrán prácticamente intactas, quizás con alguna magulladura. Son una buena opción para moto de ciudad, pero también, sin duda, para practicar enduro.

Protector maneta freno

Otra manera de blindar las manetas de freno y embrague, además de nuestras manos, son los protectores. Pueden ser integrales, esas pantallas con forma de concha que además nos aíslan del frío, o una simple varilla, generalmente instalada en el lado del freno delantero, que evita que pueda accionarse de golpe con un impacto, lo que nos causaría una aparatosa caída. Esa es la filosofía de MotoGP, donde este elemento se impuso a partir del Mundial del 2012 para evitar que un roce entre pilotos pudiera terminar con uno de ellos accionando sin querer el bloqueo de la rueda frontal. Suelen ser también de aluminio y su instalación es muy sencilla.

Grip antideslizante

Para conseguir una posición más ajustada a la moto, para que nuestras piernas se ajusten mejor al depósito de la moto, una buena opción puede ser el grip antideslizante. Estas piezas adhesivas nos ayudarán a controlar mejor la moto en los giros, consiguiendo que nuestro cuerpo y la máquina se muevan de manera más armónica y coordinada. Poder tirar más de piernas te permitirá, además, relajar más los brazos, que sin el grip, terminan haciendo toda la fuerza para que la moto responda a nuestros movimientos.

Protector para el cambio de marchas

Si practicas enduro o ruedas en circuito, este accesorio no tiene ningún sentido porque ya calzas la bota adecuada. Pero si te mueves por ciudad con una moto con marchas y sueles llevar zapatos frágiles, este protector te puede venir muy bien para evitar dañarlos. Existe la posibilidad de atarte una superficie al zapato, pero quizás lo más cómodo sea apostar por una funda para la palanca, que puede ser una simple espuma o una goma resistentes tanto a la lluvia como a las altas temperaturas.

Cinta reflectante para la llanta

Sin duda le dará un toque personal a tu motocicleta, pero también hablamos de un elemento de seguridad que deberías tener muy en cuenta en tu lista de accesorios. Su precio reducido, la estética y ser más visible durante la noche combinan a las mil maravillas para que te plantees seriamente la posibilidad de redondear tus llantas con estas cintas reflectantes. ¿Quizás de color naranja…?

Amortiguador de dirección

Puede parecer una pieza cualquiera, pensada para embellecer la parte superior frontal de la moto. Pero además de eso, el amortiguador de dirección es una herramienta que puede llegar a salvarte la vida. Este elemento regula el movimiento de lado a lado de la dirección de la moto y evita la vibración indeseada del manillar que puede terminar con el piloto por los suelos. Ese meneo descontrolado se conoce como ‘shimmy’, y más vale que nunca tengáis que experimentarlo. O en caso de padecerlo, que seáis capaces de anular sus efectos. El amortiguador consigue mitigar las sacudidas que puedan producirse en el momento en el que perdemos el control de la máquina.

Indicador de marchas

Si tu moto es un modelo más o menos actual, con un salpicadero digital, te será fácil saber en qué marcha te encuentras. Pero si vas con una máquina que no proporciona esa información, más de una vez te habrás llevado un susto al pensar que ibas en una velocidad y en realidad estabas en otra. Para tener siempre claro el desarrollo de tu moto, te proponemos que cuentes con los servicios de un indicador de marchas, que no es más que una pequeña pantalla digital que te tendrá siempre al corriente.