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Los cromados son esas partes de tu moto que, si las mantienes limpias y bien cuidadas, hacen que tu máquina luzca de maravilla. A continuación, te facilitaremos algunos consejos para limpiar los cromados de forma correcta y eficaz.
Sin duda, estás acostumbrado a ver motos con partes cromadas. Puedes creer que los cromados son solo cosa de las motos custom, pero nada más lejos de la realidad. Cualquier modelo del mercado cuenta con partes o componentes cromados, por lo que está bien saber cómo mantenerlos como el primer día.
Lo habitual de ver cromados por aquí y por allá puede que te haya hecho preguntarte por el proceso que se debe seguir para lograr semejante acabado. El cromado de una pieza también encierra distintos niveles de calidad. Vamos a poner un poco de luz en todo esto.
El cromado consiste en aplicar un recubrimiento electrolítico sobre aquella. Para eso se debe seguir un proceso que comienza por pulir el cromado de la moto. El primer pulido tiene como objetivo preparar la pieza.
Tras el primer paso se aplica una capa de cobre, que sirve para tapar poros e igualar la superficie. Este material resulta fundamental para alargar la vida del tratamiento, al maximizar la resistencia a la corrosión.
Al principio decíamos que el proceso de cromado “encierra distintos niveles de calidad” y era por algo. La diferencia entre un cromado convencional y uno de máxima calidad se esconde en repetir el pulido después de cada paso.
Cuanto más cuidado y esmero se ponga en el cromado, mayor será su calidad final, hasta llegar al llamado “show crome”. Después del segundo pulido, se aplica una capa de níquel, que de por sí ya le da un aspecto espectacular a la pieza.
Tras un nuevo pulido después de la aplicación de la capa de níquel, se aplica finalmente el cromo, con lo que se consigue un acabado de ensueño.
¿Cómo mantener el cromado en una moto ?
En cuanto al día a día del mantenimiento del cromado, esta sugerencia puede parecerte algo simple, pero el mejor cuidado que pueden recibir las partes cromadas de tu moto es que se ensucien lo mínimo posible.
¿Cómo se consigue no ensuciar un cromado? Evitando rodar con tu moto en días de lluvia, por ejemplo, o una excesiva exposición a la luz directa del sol cuando la tengas estacionada.
Si no te queda más remedio que limpiar los cromados porque se han ido ensuciando con el tiempo, debes saber que lo más efectivo y económico es emplear agua y jabón.
También existen productos específicos para la limpieza de las partes cromadas, algunos de ellos provistos de esponjas o gamuzas impregnadas con una solución química. En cualquier caso debes saber que, cuanto menos frotes sobre la superficie de un cromado, menos se estropea.
El cromado de una pieza no es un procedimiento económico. Para lograr un óptimo resultado es mejor ponerse en manos de un especialista con la experiencia necesaria para culminar un trabajo de gran calidad.
En cuanto a materiales, cromar aluminio resulta más complicado que cromar acero. Sobre las partes a cromar, no es lo mismo hacerlo sobre un tubo de escape que hacerlo en un manillar. En el escape tendrá unas condiciones de vida peores por la alta temperatura.
Es posible que también se haya manchado el cromado de un escape con la goma de una suela de calzado. Para limpiarlo se comercializan productos muy eficaces para ello.
Al mismo tiempo no debes olvidar que, si las partes cromadas de una moto se terminan deteriorando por el paso del tiempo, dependerá en gran parte del trato recibido.
También influye de forma determinante el entorno en que se haya usado la moto, cerca del mar, por ejemplo, o en una zona con menos humedad.
Si estás pensando en repetir el proceso o tratas de restaurar un cromado deteriorado, ya hemos mencionado que es caro y además resulta especialmente complicado igualar el acabado original.