La importancia del correcto mantenimiento de una moto
El mantenimiento de una moto es esencial para los entusiastas del mundo motero, ofreciendo beneficios en seguridad, economía y disfrute. Una moto bien cuidada garantiza una conducción óptima y segura, evitando averías inesperadas y costosas reparaciones.
Los componentes clave como frenos, neumáticos y suspensión requieren atención regular para asegurar viajes seguros. Además, el mantenimiento preventivo resulta en ahorro a largo plazo, prolongando la vida útil de la moto y manteniendo su valor de reventa.
Para los motociclistas, el mantenimiento también es una forma de conexión con su máquina, ofreciendo momentos de relajación y satisfacción personal al aprender y mejorar su rendimiento. En resumen, el cuidado de la moto es un aspecto fundamental de la cultura motera, siendo crucial para la seguridad, economía y la experiencia completa de conducir una moto.
¡Sigue leyendo y te enseñamos cómo hacerlo!
¿Cómo hago el mantenimiento de una moto? Guía completa:
Neumáticos
El punto más importante para poder circular seguros y tranquilos es llevar los neumáticos en correcto estado. El estado y la presión de los mismos debe revisarse periódicamente, al fin y al cabo, el neumático está en contacto con el asfalto, y cualquier fallo en este componente puede ser crítico. Da igual lo potentes que sean tus frenos, o lo rabioso de tu motor, tu moto nunca podrá ir más allá del agarre que le proporcionen las gomas que montes.
· Revisión de presión y desgaste cada 15 días
· Cambio del neumático tras cuatro años, con poco dibujo o defectos.
Hay una variedad enorme de tipos de neumáticos para moto para todos los gustos y bolsillos, pero todos deben cumplir la misma normativa. En el caso de los vehículos de cuatro ruedas el reglamento de circulación establece que la profundidad mínima del dibujo de los neumáticos debe ser de 1,6mm, en el caso de los vehículos de dos ruedas esta medida es inexistente. ¡Esto no significa que podamos dejar el neumático puesto hasta que parezca un slick de MotoGP!
Al pasar tu moto la ITV o en un control rutinario de tráfico te multarán si el neumático no posee dibujo en su banda central, aunque es cierto que algunos neumáticos sport apenas tienen dibujo en general. La recomendación es cambiar las gomas cuando lleguemos a los testigos de desgaste incorporados en estas. Recuerda que la superficie de contacto de los neumáticos de una moto con el asfalto es mínima, apenas el tamaño de una moneda grande. Un dibujo deteriorado aumenta considerablemente el riesgo de aquaplaning.
Debemos prestar también atención a que no exista ninguna deformación, grietas, ampollas o cualquier tipo de defecto visual. Además, es primordial que llevemos la presión adecuada en cada una de las ruedas, la cual podremos comprobar en el manual de usuario ¡Recuerda que esta debe ser medida con los neumáticos fríos!
A la hora de cambiar las gomas, asegúrate de seleccionar la medida adecuada, así como que se ajuste al uso al que sometes a tu montura. Existen neumáticos destinados a las motos turismo, mixtos, deportivos, de invierno… Consulta con tu taller y deja que ellos se ocupen del montaje y equilibrado para poder rodar con total tranquilidad. Y no lo olvides, los neumáticos pierden eficacia tras cuatro años desde su fabricación, pese a que puedan parecer en buen estado es recomendable cambiarlos.
Frenos
El componente más potente de una moto son sus frenos. Es sumamente importante que estos estén en perfecto estado de funcionamiento para permitirnos detener la moto de la forma más rápida y segura posible. Por ello, realizar un correcto mantenimiento de los frenos de la moto es esencial:
· Comprobación cada 3 meses o 5.000 Km
· Cambio de líquido cada 2 años
Dependiendo de nuestra moto, la comprobación y sustitución de los componentes de los frenos será más o menos sencilla.
Actualmente, hay varios tipos de sistemas de frenos en la moto, pero la gran mayoría de las actuales cuentan con frenos de disco en ambos ejes. El estado del disco es fácil de comprobar visualmente. Observaremos que no existan grietas ni golpes en su superficie y que su grosor sea el adecuado. Las pastillas también se pueden observar habitualmente desde fuera. Cuando les quede poco material de fricción (menos de 2mm) es recomendable cambiarlas para evitar que podamos llegar a rozar el metal de sus placas con el disco.
El cambio de pastillas de freno en la moto suele ser muy sencillo. Basta con soltar los tornillos que unen la pinza a la horquilla o basculante ¡No toques la maneta del freno con la pinza suelta! Después haremos presión en las pastillas viejas para recoger el pistón o pistones hasta el interior de la pinza, esto puede hacerse con un útil específico o con un destornillador plano ancho. Soltaremos el pasador o tornillos (según tu tipo de pinza) que suele situarse en el exterior de las pastillas y las extraeremos. Colocaremos las pastillas nuevas, su pasador o tornillos, y montaremos de vuelta la pinza en su lugar. Si tu pinza es flotante recuerda limpiar y engrasar los tornillos por los que desliza esta. Es importante apretar los tornillos con una llave dinamométrica a su par de apriete correspondiente. Si tienes dudas consulta con tu taller.
El procedimiento para el cambio de freno de disco es igualmente sencillo, aunque requerirá extraer la rueda de la moto. Tras esto tan solo será necesario soltar los tornillos que lo unen a la llanta, colocar el nuevo y apretar este a su par correspondiente, siendo recomendable hacerlo en orden de estrella (apretando los tornillos situados en puntos opuestos) para que se asiente de forma homogénea.
Si contamos con frenos de tambor, será necesario soltar el neumático y abrir para comprobar el estado y cambiar de las zapatas interiores.
El líquido de frenos tiene tendencia a absorber humedad (es higroscópico), por lo que con el tiempo va perdiendo eficacia y rebajando su punto de ebullición. Si lo dejamos mucho tiempo sin cambiar, además de poder quedarnos sin frenos por exceso de temperatura (aparecerán burbujas en el circuito al hervirse) el agua contenida puede corroer el interior del circuito de frenos, afectando a bomba y pinza.
Alumbrado
La iluminación de la moto es un elemento fundamental de seguridad, tanto para ver nosotros como para que nos vean. Por esto es extremadamente importante que hagamos un correcto mantenimiento de las luces de nuestra montura en perfecto estado de funcionamiento.
· Comprobación cada 15 días
· No tocar bombillas halógenas con los dedos
Tras arrancar nuestra moto procederemos a ir encendiendo cada una de las luces de la moto y comprobando su capacidad de iluminación.
La luz de freno puede fallar tanto por estar fundida esta como por estar en mal estado el interruptor de la maneta o del pedal. Te recomendamos leer este post sobre las averias electricas más comunes de las motos.
Si tienes que cambiar alguna bombilla, comprueba el manual de usuario para ver como realizar esta operación y el tipo de bombilla que se requiere. Recuerda que no debes tocar el cristal con los dedos, ya que la película de grasa que dejaremos en el vidrio puede echar a perder la bombilla rápidamente.
Actualmente muchas marcas de vehículos han empezado a incorporar luces LED, algunas llevando ya estas para todas y cada una de las luces. Si es tu caso estás de suerte, ya que la durabilidad de estas es elevadísima. Eso si, en el caso de avería será necesario que acudas al taller para que comprueben cuál es el problema.
Excelente ya que no soy experto en el mantenimiento muchas gracias