Al igual que los modelos de 125 cc dotados con motor de combustión, la ley dice que las motos eléctricas equivalentes a 125 cc no pueden superar los 11 kW (15 CV) de potencia máxima. Del mismo modo, y como cualquier modelo de 125 cc, para circular con una moto eléctrica de este tipo es obligatorio que disponga de la correspondiente matrícula con fondo blanco y que posea, como mínimo, seguro obligatorio y, en el caso de que tenga más de cuatro años, la ITV en vigor.
Por supuesto, para circular con una moto eléctrica, el conductor y el posible pasajero están obligados a utilizar un casco homologado, y es recomendable que también vayan protegidos con chaqueta específica, guantes, pantalones largos y calzado cerrado.
¿Por qué comprar una moto eléctrica de 125?
Si tenemos en consideración que una moto de 125 cc con motor de combustión consume en torno a 3 litros/100 km y que esto supone un coste de unos 4,5 €, hay que señalar que una moto eléctrica puede recorrer esa misma distancia por 1 € aproximadamente.
Dicho de otro modo, una moto de estas características puede recorrer unos 450 km con lo que una de gasolina recorre 100 km. Estas cifras son orientativas, porque dependen de si la recarga de la moto se realiza en un cargador público o si se hace en una fuente de electricidad privada o doméstica. Y si esta proviene de un sistema de energía fotovoltaica con placas solares, la diferencia a favor de la moto eléctrica puede ser mucho mayor.
Otra consideración positiva de las motos eléctricas son los gastos de mantenimiento. En cuanto a “consumibles” como pueden ser los neumáticos o los frenos el gasto es similar, pero en lo referente a aceites, filtros, bujía, transmisión, etc., el coste de una moto eléctrica es claramente inferior e incluso prácticamente nulo.
Las prestaciones que ofrecen son otro aspecto que inclinan la balanza hacia los modelos electrificados. Por lo general, ofrecen una buena aceleración desde salida en parado claramente superior a la de los modelos de gasolina, e incluso ya hay algunos que alcanzan velocidades máximas más altas.
Al respecto, hay que recordar que la mayoría están limitados en velocidad, porque cuanto mayor es esta, más alto es el consumo de batería y, en consecuencia, se reduce la autonomía de manera considerable.
Además, son más limpias y silenciosas al desplazarse y con ellas está permitido acceder a zonas de bajes emisiones sin restricciones (ZBE). También pagan menos impuestos de matriculación y circulación, llegando a estar bonificadas con hasta el 100 por ciento por algunas administraciones.
Ayudas para comprar una moto eléctrica de 125
Hace ya un tiempo que el Gobierno aprobó una deducción del 15% en el IRPF en la declaración de la renta del año siguiente a la compra de un vehículo eléctrico. De este modo, si una moto eléctrica equivalente a 125 cc cuesta 5.000 euros, el propietario se puede deducir 750€.
Por otro lado, hay municipios que mediante incentivos pretenden fomentar la movilidad eficiente y sostenible. Es el caso de la Comunidad de Madrid y el Programa MOVES III (hasta el 31 de diciembre de 2024) que subvenciona la compra de motocicletas y triciclos eléctricos de las categorías L3e, L4e y L6e.
A grandes rasgos, esto quiere decir que deben superar la categoría de ciclomotor, alcanzar velocidades de más de 45 km/h, poseer más de 70 km de autonomía, no superar los 1.000 kg de peso y no costar más de 12.100 euros.
Si se cumplen los requisitos descritos, la subvención que ofrece el Programa Moves III es de 1.300 € si se entrega una moto “vieja” para achatarrar, o de 1.100 € si no se proporciona ninguna. De este modo, una moto eléctrica de 5.000 € puede costar menos de 3.000 € si se suman las dos ayudas, los que supone un descuento superior al 40%.
Las mejores motos eléctricas de 125
De acuerdo con las cifras de matriculaciones de motos eléctricas, en el acumulado de enero a octubre de 2024, las mejores motos eléctricas en España son las siguientes:
1. Silence S01 (1.024 unidades):
Modelo que se comercializa en versiones normal y “plus”, cuyos precios de partida son 3.200 y 4.370 €, respectivamente. Ambas versiones son prácticamente iguales por fuera, y las diferencias están en el rendimiento y en la autonomía.
La más básica anuncia 100 km/h de velocidad máxima y 133 km de autonomía, y la S01+ declara la misma autonomía, pero con una velocidad de 110 km/h y una aceleración superior.
Se trata de un scooter con llantas de 15” y 14” de diámetro, con freno de disco en cada eje con sistema combinado y un gran hueco bajo el asiento con capacidad para dos cascos integrales. Entre las dos versiones, en los 10 primeros meses de 2024 se han matriculado 1.024 unidades, triplicando casi la cifra del segundo modelo más vendido.
2. SEAT MO (344 unidades)
Aunque se vende con el anagrama de SEAT en su carrocería y se comercializa en los concesionarios de la marca de coches, realmente el SEAT MO es el Silence SC01 y ambos se fabrican en la misma factoría de Barcelona.
Esto nos da una idea del dominio que tiene la marca española Silence en el sector de las motos eléctricas, porque, además de dominar nuestro mercado, también es la firma líder en Europa. El SEAT MO se distingue del SC01 en las decoraciones escogidas para su carrocería.
3. Horwin EK3 (201 unidades)
Este modelo de scooter alcanza 95 km/h y la versión más básica posee una autonomía media de 90 km. Destaca por un tamaño compactoy por las líneas suaves de su carrocería. Su precio está fijado en 3.750 €, aunque existe la posibilidad de adquirirlo con dos baterías (4.950 €). Cuenta con llanta de 14” y 13” de diámetro, dos frenos de disco con sistema combinado y llave de contacto de proximidad.
4. Segway E300SE (200 unidades)
En muy poco tiempo, la firma norteamericana Segway se ha afianzado en el mercado de las motos eléctricas con un scooter de diseño tradicional y llantas de 12”, que brilla por la calidad de sus acabados y por su buena dotación.
Aprovechando la larga experiencia en el campo de la movilidad electrificada de la marca, este modelo declara una autonomía de 130 km y una velocidad máxima de 105 km/h.
De origen viene equipado con dos baterías, pero se le puede incorporar una tercera que aumenta su autonomía en un 50% y que se vende por separado. Está dotado con ABS de doble canal y un sistema de control de tracción, dos grandes aportes a la seguridad durante la conducción. Su precio es de 4.799 €.
5. Velca ONE (199 unidades)
La marca de motos española Velca ha irrumpido con fuerza en el mercado con un scooter que ha roto barreras en lo referente a velocidad máxima y autonomía, con 125 km/h y 220 km, respectivamente.
Con un precio de partidas de 6.490 €, el ONE posee un diseño realmente atractivo y anuncia un peso de solo 103 kg, una cifra contenida para un modelo eléctrico. Cuenta con llantas de 13” en ambos ejes y ABS de doble canal. Ofrece 3 años de garantía y un buen servicio postventa.
6. BMW CE 02 (152 unidades)
Tras el sofisticado CE 04, la firma alemana BMW ha puesto en escena el CE 02, un modelo eléctrico más sencillo y de precio más contenido. Se comercializa tanto en versión ciclomotor, como en versión equivalente a 125 cc, con un precio que parte de 8.425 €.
Posee un diseño original que no pasa inadvertido, en el que destacan unas grandes llantas de 14” calzadas con gruesos neumáticos y la horquilla invertida con doble tija. Cuenta con marcha atrás, ABS de un canal y llave de contacto de proximidad. Para la versión de 15 CV se anuncian 95 km de autonomía.
7. Silence S02 (119 unidades)
El dominio de la marca española Silence en este segmento queda más que claro con las cifras de ventas del S01 y el SEAT MO, pero aún es mayor si añadimos las del S02.
Este scooter en versión L3e (equivalente a 125 cc) declara 90 km/h de velocidad máxima y 133 km de autonomía y su precio está fijado a partir de 2.980 €, lo que confirma su carácter económico. Cuenta con plataforma plana para los pies del conductor, muy útil en uso urbano.
8. Efun PUSA 5 (103 unidades)
Con un diseño clásico inspirado en las motos tipo Vespa, el Efun PUSA 5 se ha hecho un hueco en el mercado gracias a su atractivo y a un precio de solo 2.790 €.
Sus 100 km de autonomía y 90 km/h de velocidad máxima confirman que se trata de un modelo interesante que mantiene la línea de sus rivales más directos. Incluye baúl trasero de serie y ofrece una garantía de 5 años o 50.000 km (incluida la batería), con la posibilidad de extenderla hasta 8 años.
9. Super Soco TC MAX (95 unidades)
La TC MAX se desmarca de la tónica más habitual en este segmento con un diseño semejante al de una moto tradicional. De este modo posee un motor colocado en el centro del conjunto, transmisión secundaria por correa dentada, horquilla invertida, amortiguador central y llantas de 17” de diámetro. Declara 92 km de autonomía y 95 km/h de velocidad máxima. Su precio, fijado en 4.449 €, es otro de sus grandes atractivos.
10. Arena VT3
Scooter de origen asiático que puede incorporar hasta dos baterías, anunciando 100 km de autonomía con una o 140 km con dos, y precios de 3.500 y 4.500 €, respectivamente.
En ambos casos, la velocidad máxima es de 90 km/h. Está equipado con pantalla TFT, toma de corriente USB-C, alumbrado LED y alarma con mando a distancia. Cuenta con frenos de discos en ambos ejes con sistema de frenada combinada.
Preguntas frecuentes sobre las motos eléctricas de 125
¿Cuál es la edad mínima y qué tipo de carnet se necesita para conducir una 125 eléctrica?
Según la legislación vigente, existen varias opciones para poder conducir motos eléctricas equivalentes a 125 cc. Por un lado, pueden ser utilizadas a partir de los 16 años por conductores que estén en posesión del carnet A1.
Por otro lado, pueden ser conducidas por usuarios en posesión del carnet B de coche con más de tres años de antigüedad, lo que quiere decir que pueden hacerlo, como mínimo, a partir de los 21 años.
Y, por supuesto, las pueden llevar todos aquellos que dispongan de los permisos A2 o A, que se pueden obtener a partir de los 18 o 20 años, respectivamente.
Es cierto que la Dirección General de Tráfico (DGT) está pensando en hacer cambios en la normativa que pueden afectar a utilizar el carnet B para conducir motos de hasta 125 cc, incluidas las eléctricas equivalentes. Se rumorea que, además de 3 años de antigüedad del permiso, los que quieran conducir este tipo de motos con el carnet B deberán hacer un curso específico obligatorio.
Hay que dejar claro que con el carnet AM, el de ciclomotor, no se pueden conducir motos eléctricas de 11 kW. Con este permiso solo se pueden utilizar las que estén homologadas como ciclomotores y, como tales, dispongan de placa de matrícula con fondo amarillo.
¿Cuánto tiempo puede durar una moto eléctrica y cuánto cuesta su carga?
Una de las mayores preocupaciones a la hora de comprar una moto eléctrica es el tiempo que puede durar en óptimas condiciones. Las motos de este tipo no llevan muchos años entre nosotros y la electrificación es un tema que está avanzando continuamente, por lo que no es fácil confirmar cuántos años pueden durar.
Por lo que se puede saber hasta ahora, y dependiendo del uso y los cuidados, es que una batería de litio de una moto eléctrica puede durar hasta 8 años a su máxima capacidad e incluso más, y luego no se muere de golpe, sino que se puede seguir utilizando con capacidades que rondan el 80%.
La sustitución de la batería por una nueva puede suponer un desembolso que oscila entre 700 y 1.000 €, aunque en la actualidad existen empresas que las reacondicionan por una tercera parte de lo que puede costar una nueva.
Con respecto a un motor eléctrico, su duración es fácil que supere los 100.000 km sin problemas, una cifra muy difícil de alcanzar para un modelo de 125 cc con motor de combustión y, menos aún, sin ninguna avería que haya que subsanar.
Como ocurre con el resto de los vehículos, la fiabilidad y la longevidad dependen en buena medida del fabricante que las ha producido, por lo que este es un factor que se debe tener en cuenta al adquirir una moto de estas características.
Si detrás de un modelo eléctrico hay una gran firma, es muy probable que su duración sea mayor. En este caso, se habrán invertido más medios para su desarrollo, e incluso es posible que algunos de sus componentes los comparta con otro modelo de su misma marca, por lo que muy probablemente su fiabilidad será superior. Además, que esté fabricado por una marca importante garantiza un buen servicio postventa, algo que siempre se debe tener en cuenta.
En lo que a la vida útil de la batería se refiere, existen varias dudas e interrogantes. Primeramente, se ha de considerar el número de ciclos de carga y descarga, un detalle que suele ser comunicado por el fabricante de la moto. De este modo, si se conoce el tipo de uso al que va a ser destinado la moto y la autonomía que consigue con una carga, se puede hacer un cálculo del tiempo aproximado que durará la batería con su máxima capacidad.
Además de seguir las recomendaciones de cada fabricante en cuanto al mantenimiento, existen algunos procedimientos que pueden alargar la vida de una batería.
No es bueno apurar su carga en exceso y no es recomendable que esta descienda del 20%. Igualmente, es aconsejable utilizar siempre un cargador adecuado y desconectarlo una vez que la batería alcance su carga máxima.
Por otro lado, las temperaturas extremas de frío o calor pueden perjudicar al buen estado de la batería, por lo que se debe tratar de no dejar el vehículo a la intemperie durante mucho tiempo y guardarlo habitualmente en algún lugar cerrado. En el caso de motos que se utilicen poco, es aconsejable cargar la batería, por lo menos, una vez al mes, y así no permitir que se descargue del todo.
¿Qué autonomía tiene un modelo eléctrico equivalente a 125 cc?
Ante una oferta tan amplia y variada de motos eléctricas equivalentes a 125 cc no se puede generalizar y, por tanto, no todas coinciden en la autonomía.
De acuerdo con las cifras declaradas por los fabricantes, la autonomía de una moto de esta categoría oscila entre 50 y 250 km. Incluso en un mismo modelo algunas marcas, ofrecen la posibilidad de adquirirlo con una o con dos baterías, por lo que se puede duplicar en el caso de elegir la segunda opción.
De la misma manera, como en todos los vehículos eléctricos, la autonomía depende del tipo de conducción que se practique y de cuánto se gira el acelerador. También, la temperatura ambiental puede afectar a la autonomía, y en climas fríos o muy cálidos, se puede ver reducida de manera considerable con respecto a la declarada.
Asimismo, muchos modelos ofrecen varios modos de motor que modifican la entrega de potencia y la velocidad máxima, y dependiendo que se utilice, la autonomía será mayor o menor.